Eric

Hay en Madrid un tipo que comprendió la enorme fuerza que genera la convicción de ser un individuo libre; alemán de Frankfurt, español de Alicante, madrileño de juventud y aprendiz de chino.

Asi que pronto se arriara la bandera...

Para buscar nuevos horizontes depauperados.

Los ultimos dias de NNT en el edificio...

Grita la izquierda en Colombia: "Uribe fascista, Uribe terrorista"

Diario de Moscu (III)

Buscó en la guía telefónica, pero los nombres de los restaurantes no eran lo suficientemente descriptivos como para elegir uno. Algunos habían llamado su atención, pero podría ser que el dueño tuviera más dominio del léxico que de la cocina; o que fuesen demasiado caros, o demasiado insalubres.
Isaac se recostó en el sofá con el pesado volúmen cargado de nombres, direcciones y teléfonos sobre el pecho. Sintió el deseo de agitar la guía abierta y de que todos esos nombres, direcciones y teléfonos salieran disparados sembrando de dígitos el suelo del salón, la alfombra y las cortinas. También pensó en cerrar el libro y removerlo, mezclando todos los datos hasta que ningún nombre se correspondiera con su verdadera dirección, ni ningún teléfono con su verdadero dueño.
Pero no hizo nada de eso. Se incorporó, pasó el dedo índice sobre la preselección de restaurantes que había anotado en un papel arrugado y llamó al más prometedor. Le informaron de que era comida oriental. Desconcertado, no se negó a reservar una mesa para dos. Nunca había probado el sushi.
Dalia acabó de vestirse y se retocó las dudas una vez más, antes de mirarse de reojo en un pequeño y viejo espejo circular. Cerró la puerta sabiendo que llegaba tarde.
Isaac decidió, sentado sólo a la mesa, que omitiría en su diario el retraso de Dalia. Sorbió algo de cerveza, miró el reloj y se preguntó dónde estaría a las once menos cuarto.
La época de lluvias continuaba tozuda. Tal vez en Moscú esté nevando, se dijo. Dalia apareció de repente, sin hacer ruido, ocupando discretamente su silla.
Al salir, la lluvia había cesado y Dalia había disfrutado del pescado crudo.

Duele Belgica (Parte II)

Paseando por Amberes, una de cada tres personas que se cruzan por sus vibrantes calles vota a la extrema derecha.
El Vlaams Belang, partido heredero del ilegalizado por racista Vlaams Block, es el más votado, pero una coalición del resto de partidos, en forma de cordón sanitario, evita que gobierne.
Desde hace más de una década, la extrema derecha nacionalista flamenca no hace sino ampliar su base electoral. El odio a la inmigración y a la parte francófona de Bélgica son sus mejores bazas. El discurso incendiario y la retórica alejada de la corrección política, sus formas. Parecen rugir a través de la figura del léon negro sobre fondo amarillo: la bandera de Flandes.
La integración urbana no se ha producido en Amberes. Hay un barrio donde viven negros; cerca, otro donde viven asiáticos; algo más lejos, magrebíes y turcos; existen barrios para los estudiantes, muchos Erasmus; distritos de clase media belga y lujosos residenciales. No hay mezcla.
Es fácil ver adolescentes de origen magrebí, tal vez nacidos allí, deambular sin nada que hacer por el centro de la ciudad. Parecen desear las prendas de ropa deportiva de marca que no pueden comprar, así como los teléfonos móviles de última generación. No tienen trabajo, pero tampoco irán a la universidad.
Cerca, en una tienda de ropa perteneciente a una cadena europea de Pret a Porter se pueden ver mujeres musulmanes buscando prendas que combinen con su chador verde primaveral.
La mayor intensidad de la mezcla se observa en los autobuses urbanos que circulan a primera hora. Madres inmigrantes y autóctonas suben al transporte público con sus niños en dirección a la escuela. Los pequeños, de uniforme, juegan entre ellos sin importar su origen. Tal vez sea la última esperanza de Bélgica para crear una sociedad diversa en armonía.
El 11 de mayo de 2006, un joven, sobrino de una diputada del Vlaams Belang, asesinó en pleno centro de Amberes a una mujer negra y a la pequeña que ésta cuidaba. Luego, dispararó contra otra joven de origen turco.

INTERCALACION

Kenneth Garret, fotografo de National Geographic, autor de las imagenes del Evangelio de Judas, en Guatemala

DESCUBRIENDO UNA TUMBA MAYA EN WAKA PERU. SECRETOS EN LA SELVA DE GUATEMALA

¿Se considera canibalismo comer arroz modificado con genes humanos?

PESCANDO EN EL SALVADOR

EL ZONTE (EL SALVADOR)

Un paraíso para surfistas de hermosos cuerpos. Para los demás, también de hermosos cuerpos, nada.

Looking for San Salvador

Los ávidos lectores de NNT están esperando por la segunda parte de "Duele Bélgica" y por una tercera entrega del "Diario de Moscú". No obstante, NNT se encamina hacia la ciudad de San Salvador, por lo que tendrán que esperar unos días.
Para compensar, se ofrecerán jugosas instantáneas e inéditas apreciaciones sobre la realidad y la fantasía salvadoreña.

Duele Belgica (Parte I)

Amberes es una ciudad hermosa, activa comercial y culturalmente, multiétnica, portuaria, universitaria y cívica... Es un importante centro del diseño de moda, de acogedores restaurantes, de bares con centenares de clases de cerveza y mejillones al vapor, de disccotecas y joyerías. Por sus calles adoquinadas transitan en un delicado equilibrio coches, autobuses, tranvías eléctricos y, por supuesto, ciclistas. En un mismo día luce el sol, nieva, llueve y azota el viento. El formidable río Schelde atraviesa la urbe tranquilo, profundo y oscuro. Sobre él flotan enormes buques, pero no hay puentes: sólo algunos pasadizos subterráneos que sirven para cruzar a la otra orilla.
Los jueves, estudiantes universitarios venidos de todas partes llenan los bares hasta el amanecer, dejando en la puerta sus bicicletas y tragando litros y litros de cerveza.
La catedral gótica y el edificio del ayuntamiento recuerdan que Amberes fue ya un centro burgués, rico y culto en la Edad Media y que vivió un Renacimiento diferente, marcado por la pintura Flamenca. Allí aprendieron desde Van Eyck a Van Dyck o de Vermeer a Van Gogh.
En Amberes se habla flamenco, una variación del neerlandés, pero a diferencia de Holanda, se mantuvo católica.
La bella y modernista Estación Central es un centro neurálgico ferroviario con trenes partiendo y arribando constante y puntualmente hacia Bruselas, Amsterdam, París, Brujas, Gante, Lieja...
La ciudad late al ritmo de Europa: ese sueño de civilidad y prosperidad. Bélgica tiene uno de los índices de desarrollo humano más altos del mundo.

AQUI HABITABA EL CUERPO (DE PRINCESA) DE LA POLICIA NACIONAL CIVIL

Claro que ahora va a ser sede del Ministerio de Gobernación de Guatemala. En este palacio se han cometido muchos horrores, y también errores. Por cierto, cada vez la seguridad en el país depende más de los militares y menos de la policía, algo que va en contra del espíritu y la letra de los Acuerdos de Paz que pusieron fin en 1996 a una cruenta guerra civil que duró 36 años.
Esperemos que el príncipe del poder civil y democrático escale hasta la torre para besar una seguridad del Estado desmillitarizada.

CAYUCO

Alrededor de un millón y medio de guatemaltecos han emigrado a Estados Unidos. Otros muchos han muerto, han encallado o han sido detenidos en el intento.

Defensa de la vida

TANATOSTERAPIA

"Acostada desde mi tumba, el cielo se ve al revés"

CITAS

- Ángel Gabilondo, catedrático de metafísica y rector de la Universidad Autónoma de Madrid:
"Somos personas quebradas, no somos seres acabados ni plenos. Hay que entender que no es que tengas una herida, sino que eres una herida".


- Aziz Dweik, portavoz del Parlamento Palestino:
"A hungry man is an angry man".

Guatemala: Miles se manifiestan en solidaridad con inmigrantes en EEUU

Miles de guatemaltecos se manifestaron este lunes, Día del Trabajo, por el centro de la capital en solidaridad con los trabajadores inmigrantes en Estados Unidos, para rechazar el Tratado de Libre Comercio en ese país del Norte y exigir un aumento del salario mínimo.

Organizaciones sindicales, sociales y campesinas congregaron entre 25.000 personas, según la Procuraduría de Derechos Humanos, y 40.000, de acuerdo a la Coordinadora Nacional de Organizaciones Campesinas.
“Con muro o sin muro, que pasamos es seguro”, gritaban miembros de organizaciones en apoyo a los inmigrantes, mientras que diversos restaurantes norteamericanos de comida rápida del centro de la capital cerraron sus puertas al paso de la manifestación, y apenas recibieron clientes el resto del día, como habían pedido los grupos de protesta en Estados Unidos.

“Los inmigrantes son gente trabajadora. Sólo el año pasado aportaron al país 25 mil millones de quetzales (unos 3.000 millones de dólares) en remesas”, aseguró José Pinzón,
de la Central General de Trabajadores de Guatemala (CGTG). Walter Robles, asesor de la Unidad de Acción Sindical y Popular (UASP), recordó que “en esta marcha está presente mucha gente con familia en Estados Unidos y sabe el daño que causaría una ley que criminalice a los inmigrantes”.

La marcha sirvió también para rechazar el Tratado de Libre Comercio con EEUU (DR-Cafta por sus siglas en inglés) que está pendiente de ratificación en el Congreso de la República. “Su ratificación va a perjudicar a la mayoría de guatemaltecos y a beneficias a unos pocos grandes empresarios”, afirmó en declaraciones a IPS Basilio Sánchez, subcoordinador de la Coordinadora Nacional de Organizaciones Campesinas (CNOC).

El movimiento campesino aprovechó la convocatoria para exigir al gobierno de Óscar Berger que haga cumplir la ley del salario mínimo y que lo aumente, especialmente en al área rural. “De lo contrario, seguirá la pobreza y las causas de la emigración”, advirtió Sánchez, quien también hizo mención a las manifestaciones programadas en EEUU: “Nos han informado de que muchos hermanos campesinos guatemaltecos han salido a la calle en Estados Unidos, y nosotros estamos con ellos”.